La Boca- Buenos Aires

viernes, 14 de octubre de 2016




Si en Buenos Aires decimos “color” automáticamente se nos dibuja en la mente el barrio de La Boca.

Situado al sur de la ciudad, en la desembocadura del Riachuelo en el Río de la Plata, de allí su nombre, es probablemente el barrio más pintoresco de la ciudad, debido a su historia, sus costumbres y el colorido de sus construcciones.

Fue el primer puerto de Buenos Aires y asentamiento de la inmigración europea entre 1860 y 1930, especialmente de italianos genoveses, que construyeron sus viviendas de madera y chapa acanalada, armadas en seco sobre pilotes de madera para contrarrestar los estragos que producían las crecientes del río.


Te resultará curiosa la forma en que están pintadas, ya que los primeros habitantes pintaban las casa (llamadas conventillos), con sobras de pintura de los barcos y como la pintura no alcanzaba para pintar toda una vivienda de un mismo color, se usaban varios colores, hoy se sigue con la tradición, lo que da el colorido característico del barrio.





Podrás caminar por su famosa calle “Caminito”, te recomiendo visitarla en día domingo, ese día hay artistas callejeros, bailarines de tango y pintores realmente buenos.




Si hablamos de gastronomía sobre la calle Necochea, encontrarás cantinas y bares de exquisita comida italiana y sobre Brandsen y la calle Suarez las cantinas especializadas en pastas y mariscos, todo acompañado de música y bailes.

En el barrio también se emplaza uno de los clubes de futbol más famosos mundialmente “Boca Juniors”, semillero de grandes jugadores como Diego Maradona, verás reflejado el espíritu del fútbol en todo el barrio, sus colores azul y amarillo (oro) están por todos lados.


A los hinchas de Boca se los denomina “xeneises”, que significa genovés, hijo de la ciudad de Xena, en dialecto genovés.


Otros lugares interesantes que podrás visitar son los atelieres de los pintores que abren sus puertas al turismo, el Museo de Cera, o el mítico bar “La Perla”.




Una de las cosas que más me gusta fotografiar son las ventanas!










y también algún simpático habitante del barrio:)


Hasta la próxima!!

Machu Pichu - Perú

lunes, 5 de septiembre de 2016



Vivir Machu Picchu


Salir de vacaciones es desconectarse de lo cotidiano, del trabajo, del ajetreo de las ciudades, de la gente, del ruido y conectarse con uno mismo “desconectarse para conectarse” Machu Picchu es un destino ideal para este fin.

Llegar a Cuzco (la ciudad con aeropuerto, más cercana a Machu Picchu), te trasportará a la época incaica.


En los hoteles, te recibirán amablemente con un “mate o té de coca”, que ayudará a aclimatarte a la altura del lugar (3.399 m)

Recorrer sus estrechas calles, sus templos y ruinas y comprar algunos recuerdos únicos del lugar, te llevará al menos dos días.




Luego, para llegar a la Ciudadela, hay que viajar al Pueblo Machu Picchu o Aguas Calientes, dos pueblitos pequeños en la base de la montaña sagrada. 
Lo mejor es hacerlo por tren, son trenes turísticos, te recomiendo el “Vista Dome” con techo completamente de vidrio y amplias ventanillas, son aproximadamente dos horas de viaje y hay que reservar el ticket con anticipación.

Lo ideal es alojarte una o dos noches en Aguas Calientes, para poder subir al menos dos días a la montaña sagrada.  Las entradas a la ciudadela deberás comprarlas con bastante anticipación, al menos 2 a 3 meses (según la época del año), se venden por internet.

Desde muy temprano salen los buses que te llevan a la ciudadela, el ingreso es a partir de las seis de la mañana y podes quedarte todo el día recorriendo sus terrazas, escalinatas, recintos ceremoniales y lugares de vivienda.


Terminarás a la noche agotada pero feliz, prueba una rica cena peruana y al día siguiente vuelve a subir a la “Montaña Vieja” (tal el significado de Machu Picchu) y disfruta el día meditando y absorbiendo las energías que fluyen en el éter de este lugar sagrado.








Conocer Machu Picchu es una experiencia única! No te la pierdas.

Puedes completar el viaje conociendo Lima, la capital de Perú o viajar de Cuzco a Puno e ir al Lago Titicaca para conocer las islas flotantes de los Uros, eso te lo cuento otro día...